sábado, 30 de agosto de 2008

All things go.


Una noche Marta y yo conocimos a dos marroquíes que prometieron llevarnos a navegar al día siguiente.

Tres días después fuimos en coche hasta un puerto más al Sur. Nos esperaba un chico de Tánger, subido en un barco muy pequeño que se llamaba La Grande. Pasamos todo el día en alta mar, bañándonos donde el fondo del agua se vuelve negro y profundo.

Ahí comprendí todas las películas, los libros. Entendí el poder del mar y por qué Serrat escribió esa canción.

El Mediterráneo es mi agua favorita y la razón del verano.

(Sufjan Stevens - Chicago)

No hay comentarios: